En las dos primeras sesiones dimos
Matemáticas, donde acabé mi secuencia didáctica. Hicimos una actividad que
había preparado en una Power Point, luego hicieron una ficha que les mandé
hacer en clase y finalmente jugaron a un Kahoot que había hecho sobre
fracciones. Me he fijado que tanto en el Power Point como en el Kahoot (y sobre todo en este último) se mantenían mucho más concentrado e interesados. En el Kahoot se entregaron al máximo e incluso cuando acabó me pedían más preguntas; al tratarse de una competición los niños se entregan a fondo, pues todos quieren ganar. Me he fijado que muchos de los fallos que tenían era por no leer bien las preguntas, algo que sin duda he recalcado varias veces para hacerles ver su importancia.
En Educación Física fuimos a ver
un “museo” que habían hecho los de Infantil, con cuadros y representaciones de
obras de arte de distintas pintoras y pintores famosos. Ha sido algo muy divertido y me ha gustado mucho esta iniciativa, pues ha servido para que niños de todo el centro aprendan historias y datos personales sobre distintos autores y sus obras.
En CCSS hicieron grecas y cuando terminaron,
se pusieron a leer un libro que cada uno tenía a medias.
Después del recreo me fui a 5º
con mi tutora a hacerle unas preguntas. En esta clase
dieron la lectura de números egipcios, y después robótica, aunque antes de
ponerse con robótica estuvieron un rato leyendo como “castigo” porque se habían portado bastante mal. Hay que tener cuidado con esto, pues los niños pueden asociar la lectura como un castigo, lo cual puede hacer que rechacen esta actividad.
A última tuvieron Música, donde estuvieron practicando
la canción que van a cantar en la función de navidad. Después de ensayarla, la
profesora les enseñó el do agudo y tocaron una canción con xilófonos y flautas
donde aparecía el do agudo para que vieran cómo sonaba.
Fotos del museo que hicieron los de Infantil:
Reflexión semanal
Terminamos la 6ª semana. Ha sido una semana muy enriquecedora. Como ya comenté la semana pasada, en esta he realizado mi secuencia didáctica, y ha sido una experiencia que me ha permitido aprender diversos aspectos de la enseñanza y de la profesión. He aprendido a planificarme sesiones desde cero, que además estén interrelacionadas y en las que exista una continuidad. Los alumnos se han entregado en cada una de las clases y me han enseñado en qué tengo que mejorar como futuro docente sin ellos saberlo. He acabado satisfecho con mi trabajo, pues aunque a veces he modificado mi secuencia en función a las necesidades y dificultades que se surgían, todo ha salido bien y he podido comprobar que han aprendido.
Además de la secuencia, también he participado en algunas actividades que planteaban otros profesores, al igual que he seguido apuntando y analizando aspectos del día a día que me han ido llamando la atención reflexionando sobre ellos. Algo que me he dado cuenta es que aprenden mucho mejor desde la diversión, desde el juego. La atención y concentración que tienen cuando juegan no es la misma que cuando están haciendo ejercicios tradicionales del libro.
Soy consciente de que esta ha sido la penúltima semana, lo cual me entristece. Ahora es cuando más capacitado me siento para ejercer como docente. Los profesores y los alumnos me cuentan como uno más y eso es lo que más feliz me hace. Me aporta mucha seguridad y mucha tranquilidad, y eso lo veo reflejado en mi comportamiento en clase con los alumnos, quienes se entregan al máximo cuando realizo alguna tarea. Espero impaciente a la semana que viene, pues sé que será una semana diferente cargada de momentos únicos, aunque también sé que es la última semana, y no quiero que esto acabe.
Fotos del museo que hicieron los de Infantil:
Reflexión semanal
Terminamos la 6ª semana. Ha sido una semana muy enriquecedora. Como ya comenté la semana pasada, en esta he realizado mi secuencia didáctica, y ha sido una experiencia que me ha permitido aprender diversos aspectos de la enseñanza y de la profesión. He aprendido a planificarme sesiones desde cero, que además estén interrelacionadas y en las que exista una continuidad. Los alumnos se han entregado en cada una de las clases y me han enseñado en qué tengo que mejorar como futuro docente sin ellos saberlo. He acabado satisfecho con mi trabajo, pues aunque a veces he modificado mi secuencia en función a las necesidades y dificultades que se surgían, todo ha salido bien y he podido comprobar que han aprendido.
Además de la secuencia, también he participado en algunas actividades que planteaban otros profesores, al igual que he seguido apuntando y analizando aspectos del día a día que me han ido llamando la atención reflexionando sobre ellos. Algo que me he dado cuenta es que aprenden mucho mejor desde la diversión, desde el juego. La atención y concentración que tienen cuando juegan no es la misma que cuando están haciendo ejercicios tradicionales del libro.
Soy consciente de que esta ha sido la penúltima semana, lo cual me entristece. Ahora es cuando más capacitado me siento para ejercer como docente. Los profesores y los alumnos me cuentan como uno más y eso es lo que más feliz me hace. Me aporta mucha seguridad y mucha tranquilidad, y eso lo veo reflejado en mi comportamiento en clase con los alumnos, quienes se entregan al máximo cuando realizo alguna tarea. Espero impaciente a la semana que viene, pues sé que será una semana diferente cargada de momentos únicos, aunque también sé que es la última semana, y no quiero que esto acabe.
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